Por Erica Zur Werra
La nueva producción de Apple TV, cuenta con un gran elenco, una historia formidable y dos actuaciones más que memorables.
Todo comenzó en los años 90, como no podía ser de otra forma, en la cuna de los asesinos seriales, EE.UU. Específicamente en Indiana, donde fue encontrado el cuerpo de una adolescente de 14 años: Jessica Roach. La cual había estado desaparecida desde hacía 6 semanas.
Este hallazgo fue el puntapié inicial para que varias mujeres llamaran a las autoridades informando que “un hombre en una camioneta” las había estado acosando.
Aquí comienza la investigación del policía local Brian Miller (Greg Kinnear) quien luego de sospechar que puede haber más casos relacionados, se comunica con el FBI para trabajar con ellos, ya que llegan a sospechar que el hombre identificado como dueño de la camioneta, Larry D. Hall (Paul Walter Hauser), puede ser el asesino de 14 chicas, que hasta el momento, estaban desaparecidas.
Hasta acá podríamos decir, bueno, es un caso más de un asesino en serie. Pero aguarden un segundo, porque acá es donde se pone potente la situación.
Luego de varios años de su arresto, están frente a una apelación con posibilidades de libertad, ya que la defensa del condenado, insiste en que sus confesiones fueron coaccionadas por la policía.

Por lo cual ponen en marcha un plan para evitar la salida de Hall. Acá es donde entra el personaje de Taron Egerton (el nominado al Oscar por su actuación estelar en Rocketman), el traficante de drogas James Keene, al cual lo sentenciaron a 10 años de prisión por sus acciones.
Y ustedes dirán ¿pero qué es lo que tiene que hacer? Bueno sencillo, tiene que hacerse amigo de Larry Hall y lograr que confiese donde enterró los cuerpos de sus víctimas.
Si lo conseguía, no solo le iban a condonar la pena, sino que iba a lograr que este monstruo no saliera nunca más de la cárcel.
Esto es lo que vemos en la última mini serie de Apple TV Black Bird: confesiones de un asesino, creada por Dennis Lehane. La misma consta de 6 capítulos, de una duración estimada de 1 hora cada uno.
Durante esos 6 capítulos vamos a conocer la vida de James Keene, como termina siendo traficante de droga, la relación con su padre, el cual es interpretado por Ray Liotta, en lo que fue su último trabajo antes de su fallecimiento este año 2022. Y todo lo que le sucede adicional a su encuentro con un asesino, ya que si no fuera poco ese detalle, tiene que lidiar con la corrupción policial.

Creo que por calidad del reparto no debería ser necesario aclararlo, pero lo voy a hacer de todas formas: Paul Walter Hauser y Taron son la dupla perfecta, se complementan con una naturalidad pocas veces vista, cumplen con creces sus papeles, mostrando lo antagónicos que son estos dos personajes y como logran un vínculo impensado.
Les crees todo lo que les está pasando a lo largo de la serie, Taron logra que te pongas en su piel y pienses
¿Qué haría yo si tengo que escuchar a una persona detallando como secuestraba, violaba y mataba adolescentes sin poder inmutarme?
Y Paul W. Hauser, solo queda ponerse de pie, su actuación, si esto fuera una película, sin dudas seria meritoria una nominación al Oscar (para competirle a Austin Butler por su papel como Elvis…pero eso es para otra reseña). Si no conocen mucho de este actor, les recomiendo que vean “Richard Jewell” de Clint Eastwood, donde Paul esta como protagonista al lado de Kathy Bates.

Sin más que agregar, si te gustan las historias de detectives, investigaciones, el FBI y grandes actuaciones, esta es la serie para vos. Acá podrás conocer la historia de uno de los asesinos seriales más prolíferos de los Estados Unidos, con un ritmo muy dinámico a pesar de su duración, buen guion y mucha intriga, porque a pesar de que sabemos que está condenado, James Keene ¿consiguió las confesiones del asesino?
Dale play y entérate, que no te gane la ansiedad, no vale googlear.