Por Erica Zurr Werra
En el condado de Albany se anunciaba una organización de marketing multinivel que ofrecía cursos y seminarios de desarrollo personal y profesional, uno de sus pilares fundamentales era la moral. Pero lo que comenzó como un grupo de ayuda, termino con denuncias por tráfico sexual y trabajo esclavo.Esta es la historia de NXIVM y Keith Raniere.
En el 2020 se estrenó en HBO una serie documental llamada “The Vow”, cuenta con una temporada inicial de 9 capítulos, donde nos explican los comienzos de este grupo, aparentemente innovador, liderado por Keith Raniere.
Esta sociedad se llamaba: NXIVM.
Sus cursos prometían un camino a la felicidad, lo que atrajo a muchas personas adineradas, hijos de ex presidentes e incluso actrices famosas.
Básicamente Raniere, apuntaba a gente que no tuviera un gran propósito en la vida y los convencía gracias a que sus talleres ofrecían herramientas para la superación personal. Por otro lado, el dinero de ellos también servía.
El documental cuenta con una gran cantidad de grabaciones de NXIVM, de todos sus integrantes, ya que Raniere decía que quería dejar todo documentado para las generaciones futuras.
Su nivel de egocentrismo y creencia en que era el hombre con el CI más alto de la actualidad era exorbitante. Eso fue de gran ayuda para poder convencer a todos sus alumnos.
A través de las imágenes, se observa como sus seguidores prácticamente lo sentían como un ser superior, un iluminado del conocimiento.
Por supuesto que el tener gente de Hollywood entre sus filas ayudaba a su credibilidad y a conseguir más adeptos. Uno de los nombres más relevantes para el público, cuando salió la noticia de las demandas hacia este grupo, fue el de Allison Marck, conocida por su papel en la serie de “Smallville” (2001), la cual tuvo un importante papel la creación y posterior reclutamiento de integrantes, para una sociedad paralela de NXIVM llamada DOS.
Una organización dentro de otra, casi secreta y solo para mujeres seleccionadas.
Si bien muchos miembros ya habían comenzado a abandonar la institución porque se sentían excesivamente controlados por las reglas que les impartían (llegaron hasta controlarles el peso), todo se empieza a acelerar cuando varias mujeres integrantes o casi integrantes de DOS, se van e indican que ese grupo, enmascarado bajo el eslogan de la “sororidad entre mujeres”, era una trampa para la esclavitud sexual.
De hecho, para poder ingresar, no solo les pedían un “seguro”, que podía ser desde una carta donde hablaran mal de sus familias, hasta fotos desnudas, sino que debían pasar por un ritual en donde se las marcaba a fuego con un símbolo en la pelvis.
Símbolo que después se darían cuenta que eran las iniciales de Keith Raniere y Alison Marck.

A medida que avanza el documental todo se va poniendo cada vez más oscuro, aunque por momentos algunos podían oscilar entre creer o no en la culpabilidad del líder, creo que todas las dudas quedan despejadas con la segunda temporada, que además de continuar con los testimonios de las víctimas, nos adentra en el juicio que se llevó a cabo en el 2020.
También se suma el relato de la segunda al mando, Nancy Salzman.
Ella estaba imputada en el juicio y nos cuenta su perspectiva sobre lo sucedido todos esos años. Incluso nos dice como en la actualidad tiene dudas, sobre la creación del grupo y si en realidad fue toda una farsa desde el comienzo, con la finalidad solo de que Raniere pueda terminar teniendo acceso sexual hacia las integrantes de la institución.
Los detalles cada vez son más perturbadores y el punto final al destino de Raniere lo pone “Camila”, una chica mexicana con la cual tuvo relaciones sexuales siendo menor de edad y que luego termino encerrada en una habitación durante 2 años, por haber tenido contacto físico con otro hombre diferente a su amo, Keith.

Si bien aún queda un mínimo de seguidores, que creen que el juicio fue injusto y fraudulento, nada impidió que Raniere fuera condenado a 120 años de prisión por delitos de explotación sexual, pornografía infantil, secuestro de identidad, entre otros cargos.
Mucha documentación, tanto en audio como en video, miles de testimonios, fotos, grabaciones, etc.
Datos y más datos se solapan entre sí para darle a este documental una cantidad inmensa de material.
Empieza de menor a mayor y cuando pareciera que ya es redundante lo que nos están contando, surge nueva información.
Podría haber sido un poco más corto, ya que hay diálogos y escenas que pecan de excesivas, pero la realidad es que está bien llevado y en muchos momentos nos hace pensar que, a lo mejor, si este psicópata no hubiera sido tal, muchas de las cosas que lograron hubieran ayudado a la gente…. ¿o no?